La más que posible nominación del hijo del presidente, Jean Sarkozy, a la cabeza del el mayor dristito de negocios de Europa- La Defense en París- hace que al Elíseo le lluevan las acusaciones de nepotismo. Sarkozy junior rechaza las críticas: “ Es verdad que sólo tengo 23 años y comprendo que la gente pueda hacerse algunas preguntas. Me gustaría reunirme con todas las personas que me atacan y las que tienen dudas para decirles que pido que me juzguen por mis actos. Que me juzguen por mis acciones, si confían en mi”. El Consejo General del EPAD, el ente público que gestiona 160 hectáreas de empresas a las afueras de París, tiene que renovar su presidencia. El hijo de Sarkozy tendría ya asegurada la mayoría de votos. Para este diputado del partido gubernamental conservador, UMP, la posible nominación de Jean Sarkozy no es acertada, sobre todo ahora “con miles de jóvenes con mayor preparación universitaria, que no consiguen encontrar trabajo”. El hijo mediano de Sarkozy ni siquiera ha acabado sus estudios de Derecho. Está cursando el tercer año. Las críticas más violentas llegan desde el partido Socialista. “Se trata de un procedimiento nepotista, inadmisible en nuestra república. En ocasiones, las acciones de Sarkozy son contrarias a la república”. En cuanto a su trayectoria profesional, Sarkozy junior es diputado provincial de la región de Hauts-de-Seine y concejal de Neully.
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